Una adolescente de 16 años denunció que su tío abusó sexualmente de ella. También aseguró que después la acosaba por mensajes de WhatsApp y hasta le pedía hacer un trío sexual con su tía. El Esquiú.com dialogó con la joven denunciante y su madre, quienes relataron los aberrantes hechos, indicando que por las influencias que el hombre tiene en el Poder Judicial y político de Andalgalá (donde ocurrió el hecho), no fue arrestado pese a que la denuncia fue radicada en octubre pasado.
La menor de edad relató que “tiene 44 años y es la pareja de la hermana de mi mamá. Todo empezó cuando hicimos un viaje familiar a Chile en enero de 2020. Un día mi mamá salió con mi tía y mis abuelos, y yo me quedé a limpiar el departamento. Él entró, primero me intentó besar y decía que le atraían mis pechos y que le parecía muy linda. Le dije que no quería saber nada con él porque era a pareja de mi tía y que se retirara y se fue. Después me mandaba mensajes de WhatsApp, pero los eliminaba con la función de ‘eliminar para todos’. Me decía que era hermosa y me saludaba. ”Al volver de Chile, era el 23 de febrero y fuimos un domingo a comer a la casa de mi abuela, y yo le pedí que me traiga a mi casa porque mi papá se había vuelto. Me dijo que me iba a acercar y yo iba tranquila porque no estábamos solos, estaban mi hermana y mi prima (…) pero después fuimos a su casa, porque mi mamá nos iba a buscar allí. Ingresé por la puerta del fondo y él dijo que iba al taller. Mi prima se quedó con mi hermana en el living y yo fui a la habitación a ver televisión hasta que mi mamá llegara. Entonces él entró, me pidió el control del tele, se lo di y directamente puso pornografía, porque ellos tienen DirecTV. Ahí traté de salir de la habitación pero no me dejó, me decía que yo era la culpable de lo que iba a pasar. Me violó y me obligó a que le practicara sexo oral. No me lo pude sacar de encima porque es grandote y pesado”, contó. Siguiendo con su relato, la adolescente dijo: “Al rato llegó mi mamá. Él me había dicho que me tenía que quedar callada, que piense en mi prima, y que nadie me iba a creer porque él iba a decir que yo lo provoqué. Tenía miedo, porque pensaba que mi tía iba a pensar eso, entonces me quedé callada, pero yo nunca busqué nada. Pasaba el tiempo y él me seguía acosando, en reuniones familiares buscaba sentarse al lado mío y me tocaba la pierna”. En la continuidad de su relato, la adolescente expresó: “En el mes de junio me seguía mensajeando y me propuso que hagamos un trío sexual con mi tía. Ese día íbamos a ir todos de paseo y cuando ayudaba a cargar unas bicicletas en una combi que tiene él, subió y me dijo que estaría bueno que yo le propusiera a mi tía que hiciéramos un trío y que yo la convenciera. Yo me quedé callada, no dije nada”. Graves secuelas La joven relató que el suceso tuvo gran repercusión en su vida y su comportamiento y que, al no contar lo sucedido, la situación la carcomía cada vez más. “Comencé a pelear mucho con mi mamá, subía fotos a las redes sociales que no eran apropiadas. Me comencé a hacer cortes, me provocaba el vómito. Me sentía mal, me sentía sucia por lo que me había pasado y descargaba mi odio hacia él de esa manera, hiriéndome, porque no tenía otra. Yo le quería decir a mi mamá lo que había pasado, pero me acordaba de lo que él me había dicho y a lo último no hablaba. Yo estoy con tratamiento psicológico todavía, pero en ese momento ni a mi psicóloga le había dicho lo que me pasó”. La jovencita indicó que fueron tales los conflictos en su casa que se fue a vivir un tiempo con su abuela y con el paso de los meses, en octubre del año pasado, el hecho de abuso sexual salió a la luz y decidió hablar del tema y radicar la denuncia penal en la Fiscalía de Segunda Circunscripción Judicial. “Él salió a decir que yo soy una calentona y lo provoqué para que él llegara a ese punto y mi tía le creyó. Dijo que todo fue culpa mía y ella ahora lo sigue apoyando a él”, aseguró apesadumbrada. La madre de la joven, a su vez, indicó que la causa está en manos del fiscal Alejandro Scidá y se ordenaron distintas medidas, como el protocolo de abuso y un reconocimiento que la presunta víctima hizo en el lugar de los hechos, pero que pese al paso del tiempo, no se produjo la detención del sospechoso. “Nosotros pensamos que porque él tiene influencias en la Fiscalía, ya que su madre trabajó mucho tiempo allí y tiene otros contactos políticos, nunca lo arrestaron, lo que sí hubieran hecho con alguien que no tiene influencias. Ahora no tenemos recursos para pagarle a un abogado, pero varias veces hemos ido a preguntar cómo sigue la causa y no tenemos respuestas”, aseguró la mujer.esquiu
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