De cara el proceso interno para la renovación de autoridades del radicalismo, la línea Morada que comanda el médico Roberto Gómez en conjunto con la diputada Juana Fernández, realizó ayer su plenario en Andalgalá. Allí, la legisladora fue clara con las y los dirigentes del sector. Les comentó que otras líneas (aludiendo a la Celeste) solo con su antigüedad pretenden conducir la UCR, que la unidad es un anhelo trabado por “intereses determinados” y le volvió a apuntar a Francisco Monti puesto que “necesita el sello para poder seguir entregándonos al PRO y al ARI”. Fernández incluso mencionó que la Mesa de Juntos por el Cambio ya había definido las candidaturas para este año aunque Morada hizo caducar esa idea.
En primer lugar, la referente de Morada le comunicó a la dirigencia del espacio los diálogos que se dieron en el último tiempo. A la línea Celeste “le manifestamos que nosotros queremos ser conducción del partido y le dimos algunos fundamentos”. En esta línea mencionó que “estaban muy quisquillosos porque, aparentemente, hay sectores del partido que creen que porque tienen antigüedad tienen el derecho a pretender la conducción del partido”. Esta perspectiva no fue compartida por Fernández, quien remarcó que “la democracia habilita a urnas y no hay que tenerle miedo a la cajita”.
Según señaló, en esas conversaciones Morada planteó que en el interior se respeten lo que militancia decida. Ilustró con Tinogasta donde existe la necesidad de hablar entre sectores. Sin perjuicio de ello, distinguió que esos sectores son los “que pueden que alguna vez llevaron a un radical a votar o que en alguna elección aparecieron, no líneas internas que dibujaron avales”. También remarcó que la militancia del interior tiene libertad de elegir, “la libertad de construcción, porque hay que militar y trabajar”.
En este marco, la diputada les comentó que su experiencia en la presidencia del Comité Capital no fue grata: “Tuve que trabajar sola porque muy poco les importa las secretarías o como generar alternativas”. “Eso no les tiene que pasar en el interior” advirtió y los instó a que elijan autoridades comprometidas priorizando “los convencionales”.
En otro momento, se refirió a la unidad que manifiestan otras líneas para indagar: “¿Si le conviene a un sector es unidad?”. “Eso no es unidad, es hipocresía” respondió, y subrayó que “hay que hablar de igual a igual y manifestar que las oportunidades de la conducción del radicalismo no es de esa manera”. “Me encantaría que todos estén unidos, pero hay unidades e intereses determinados” continuó Fernández para apuntarle al presidente de la UCR provincial, Monti. Es que, según expresó, “necesita tener el sello, o alguien afín a él, para poder seguir entregándonos al PRO y al ARI, así de fácil”.
En este sentido, incluso contó que en la Mesa de JxC habían dispuesto la modalidad para la selección de candidatos de cara a las venideras elecciones. “No se lo permitimos” aseguró. También indicó que el Gobierno les “corrió el arco” con la fecha de los comicios ya que si hubiesen celebrado en marzo su espacio quedaba fuera. “Ya habían decidido los candidatos” insistió.
La legisladora remarcó que la línea que integra aún no acordó “nada con nadie”. “Si hay un teléfono descompuesto que les dice que hablaron con Gómez y Morada, les están mintiendo” cerró Fernández.
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