Proyecto Arqueológico Pomán


El proyecto se propone el desarrollo de investigaciones arqueológicas sistemáticas en la vertiente occidental del cordón del Ambato, en territorio del actual Departamento Pomán, Provincia de Catamarca.

"De esta manera esperamos contribuir al conocimiento de las sociedades humanas que se desarrollaron en la región como así también establecer las relaciones y vínculos que mantuvieron en distintos momentos de su historia con áreas cercanas. Nuestro trabajo se fortalece mediante la interacción de las comunidades locales, tendiendo de esta manera a la implementación de tareas conjuntas que se orienten a la reconstrucción de las historias locales, y a la valorización y protección del patrimonio arqueológico e histórico desde una base de participación comunitaria".

Son parte del mismo Barale Andrés, Villafañez Emilio, Vergara Marcia, Nieto Iturres Elizabeth, Salvadeo Pablo, Ávila Navas Mariana, Martínez Carricondo Marina, Gerardi Diego, Cuello Bulacios Cecilia, Villafañez Pablo.

Las investigaciones arqueológicas dentro del Departamento Pomán han sido más bien escasas y han presentado poca continuidad. La referencia a asentamientos arqueológicos data desde inicios del siglo XX, y responde, salvo alguna excepción, a la presentación de algún asentamiento puntual. Por ello consideramos necesario iniciar realizando prospecciones arqueológicas en el Sector Sur del Departamento, permitiéndonos generar una carta arqueológica de las ocupaciones humanas en el pasado y valorizar el deterioro sufrido y el potencial riesgo de impacto como consecuencia del crecimiento urbano.

Las prospecciones y relevamientos se concentraron en los lugares donde el riesgo de impacto por crecimiento de la población actual es potencialmente más alto, siendo estos sectores el piedemonte al Oeste y al Sur de la Villa de Pomán. El resultado al momento es un total de 46 sitios identificados, que por asociación a algunos materiales estilísticamente diagnósticos nos pueden remitir a diferentes temporalidades. Sin duda el rasgo más conspicuo del registro arqueológico es el imponente paisaje agrario, por ejemplo, el conjunto de estructuras denominadas Los Rastrojos responde a este tipo de modelación del paisaje, y mide aproximadamente 170 hectáreas. En este sector se encuentran canchones de cultivo aterrazados, terrazas de cultivo, estructuras de defensa contra los torrentes, destinadas al control de la erosión hídrica, canales de riego, y algunas estructuras habitacionales. Se encuentra conformado por 24 sitios arqueológicos de los cuales 8 corresponden a posibles estructuras habitacionales aisladas, 11 a espacios agrícolas asociados a recintos habitacionales y 5 conjuntos de estructuras agrícolas. Respecto a las estructuras habitacionales, podemos mencionar que pudimos observar dos estrategias diferentes de asentamiento.

Mientras que, por un lado, las viviendas vinculadas a los espacios agrícolas se disponen de manera dispersa, por otro, hay asentamientos concentrados a los que podríamos denominar pequeños poblados, como por ejemplo el sitio Pajonal 05, con más de 50 estructuras, muchas de las cuales probablemente funcionaron a modo de habitaciones articuladas a otras que pudieron fungir a modo de patios. Si bien aún falta confirmar o descartar que los espacios agrícolas sean contemporáneos con las viviendas, es muy posible que hayan funcionado en conjunto, lo que significaría una incipiente segregación de los espacios domésticos respecto a los productivos, con algunas estructuras a modo de “puestos” entre las terrazas y canchones de cultivo.

Otros elementos que destacan entre las materialidades registradas, son una serie de bloques de rocas metamórficas con grabados, en proximidades al arroyo Antaca, un curso de agua temporario. Registramos 9 conjuntos de petroglifos, todos asociados a estructuras agrícolas. Los diseños de éstos son tanto figurativos como abstractos, entre los primeros se pueden observar algunas figuras de camélidos y representaciones humanas.

Con respecto a la cronología de los asentamientos, si bien aún es aventurado precisar fechas, como mencionáramos la presencia agraria está fuertemente representada, mientras que no hemos registrado evidencias de grupos cazadores recolectores en la región, sin embargo no descartamos la idea de que éstos grupos hayan ocupado el piedemonte con temporalidades similares a otros puntos del territorio provincial. Podríamos aventurar que al menos una parte de las estructuras agrícolas registradas fueron construidas durante el Primer Milenio, a juzgar por la presencia de determinados tipos cerámicos registrados en superficie (Ciénaga, Alpathauca y Aguada). Asimismo, hay presencia de material cerámico atribuido a momentos tardíos, principalmente algunos fragmentos que pueden corresponder a urnas de tipo Sanagasta.

Finalmente, la presencia incaica está bien registrada en la región según los trabajos de Bruch (1911), Lafone (1902) y Kriscautzky (2010); sin embargo los trabajos de prospección realizados al momento no dan cuenta de ello. Por último, quisiéramos referirnos al crecimiento urbanístico de la Localidad de Pomán, que actualmente se encuentra avanzando sobre el sector Los Rastrojos. Si bien, hemos logrado articular con la Municipalidad de Pomán a fin de tratar de mitigar los daños al registro arqueológico que ocasiona el crecimiento del pueblo, es el mencionado sector el cual necesita de la concentración de nuestros esfuerzos.

Publicar un comentario

0 Comentarios