Así lo confirmó el intendente de Aconquija, Cristian Gutiérrez, tras ofrecer el asesoramiento legal de parte de la comuna. La familia de Carlos Lombardi, quienes dicen ser propietarios ahora del terreno, mantienen también otro conflicto similar con una comunidad originaria en la zona.
El pasado fin de semana residentes de Aconquija se movilizaron para proteger la centenaria capilla «Nuestra Señora del Rosario» ante la aparición de una persona que refirió ser dueña de la propiedad donde el templo está emplazado. El hecho que conmovió a la comunidad toda, sigue generando acciones, tendientes estas a revertir lo que se considera una maniobra de parte de la familia Lombardi, de origen tucumano. Ante esto, desde la comuna se ha ofrecido asesoramiento legal para revertir la apropiación de la capilla de casi 150 años.
Así lo confirmó el intendente Cristian Gutiérrez, quien junto a los vecinos se movilizan para impedir el avance tucumano en más terrenos de Aconquija. En cuanto a la prosecución de esta causa, el jefe comunal adelantó que el trámite judicial lo llevará adelante el Obispado Diocesano, tal y como se lo informaron a él. En este sentido dijo en el diálogo con Radio Valle Viejo «nosotros hicimos el ofrecimiento, pero el Obispado es el que se va a hacer cargo del caso. No obstante, no hay antecedente de alguien que antes haya intentado avanzar sobre estos terrenos, ni que tuviera dueños. De hecho, este terreno ha sido donado hace 140 años y ha pasado mucha gente en este tiempo y solo esta familia y sus herederos, son los que avanzaron cerrando lotes que dicen son de ellos y por eso han avanzado con el alambrado que está al costado de la iglesia».
La capilla en cuestión tiene una gran raigambre en la historia y la fe de esta localidad, porque según lo refieren los vecinos y la documentación con la que se cuenta, es aquí donde se asentaron las primeras evangelizaciones jesuitas que venían del norte, y desde allí pasaban por Belén, Andalgalá y trasladarse hasta Chile. Por eso la comunidad no quiere dejar pasar lo hecho por la familia de Carlos Lombardi, que sin presentación de papeles que documenten su propiedad, avanza sobre este terreno, luego de haber hecho lo mismo en otros lugares.
Al respecto, intendente Gutiérrez señaló que la versión de quienes son señalados como usurpadores, es que «hubo una mala interpretación de la donación». A criterio de esta familia, el modo en que está medido el terreno, es lo que estaría marcando la diferencia. En este sentido el jefe comunal dijo: “Ellos dicen que antes se median con varas y no con metros, lo que hace que imposible que toda la superficie sobre la que está construida la capilla le pertenezca a la Iglesia”.
Lo llamativo es que este no es el primer conflicto en suelo catamarqueño que está relacionado con esta familia. Se conoce ahora que Lombardi, quien tiene otros terrenos en la localidad de Alumbrera, mantiene un conflicto con una comunidad originaria por tierras ubicadas en cercanía a la Ruta n° 1.
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