Alarmante situación en el norte de Fiambalá por la sequía


La región Norte de Fiambalá atraviesa por una importante sequía que genera la preocupación de los vecinos por la escasez extrema de pasturas para la alimentación de su ganado vacuno y caprino. Los animales se encuentran en una situación deplorable por lo que los pobladores se organizaron para poder asistirlos con fardos de pastos que fueron donados por empresas y el municipio de esta localidad.

Diferentes organismos del municipio relacionados con la agronomía y la actividad rural, optaron por encerrar en corrales a los vacunos y así poder alimentarlos con las pasturas donadas para poder recuperarlos de esta manera.

Esta estrategia del encierro en corrales que se prepararon exclusivamente para enfrentar esa situación, se desplegó tanto en Antinaco como en Punta del Agua, en ambos lugares hasta el momento se superan las 100 cabezas de ganado.

Si bien el número de los fardos donados es cercano a los mil, la inquietud de los pobladores está centrada en cuánto tiempo irá a durar el alimento donado, considerando la gran cantidad de animales que deben ser asistidos, el tiempo que resta para que comience la temporada de lluvias y el tiempo que demorarán las pasturas en volver a brotar.

A esta situación se le debe sumar la complejidad del traslado de los animales a los corrales, porque en muchos casos no pueden trasladarse por el débil estado en el que se encuentran, al punto que los productores debieron diseñar angarillas para poder movilizarlos de un lugar a otro. En muchos casos la falta de alimentación afectó su salud e incluso fueron encontrados muertos junto a sus crías por la falta de leche.

En cuanto los caprinos, la situación se agravará en los próximos días cuando se acaben los pequeños que aún quedan en la zona.

Menos cauce

Según explicó Arturo Rodriguez, de FM Tabaruco de Fiambalá, las casas de los vecinos de Punta del Agua son abastecidas con agua potable con el líquido elemento proveniente del río del mismo nombre, que es sometido a un proceso de potabilización.

El problema es que la falta de lluvias afectó este afluente al punto que su caudal se redujo a la mitad, incluso en la temporada de lluvia el caudal no llega a ser el mismo que años atrás.

Diagnóstico

Con respecto a los trabajos que comenzaron a realizar en conjunto los organismos municipales, Rodríguez comentó que se espera que para las próximas horas cuenten con un diagnóstico de la situación y una idea de las líneas de trabajo que llevarán adelante.

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