La parroquia Nuestra Señora de Belén tiene nuevo párroco


El domingo 2 de marzo, tuvo lugar la asunción del padre Martín Melo como nuevo párroco de la Parroquia y Santuario de Nuestra Señora de Belén y Administrador Parroquial de la Parroquia Nuestra Señora del Rosario, con sede en Hualfín, departamento Belén.

Las actividades programadas para esta jornada especial se iniciaron en las adyacencias de la plaza principal de Belén, donde la comunidad recibió a su nuevo pastor y juntos se encaminaron hasta el atrio del principal Santuario mariano del Oeste catamarqueño. Allí se realizó un breve acto protocolar en el que se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino, interpretado por la Banda de Música Municipal, y seguidamente se escucharon las palabras de agradecimiento al padre Juan Ramón Cabrera, anterior párroco, y de bienvenida al padre Martín Melo, por parte del intendente de Belén, Dr. Cristian Yapura.

Después, todos juntos ingresaron al templo, donde se celebró la Santa Misa, presidida por el obispo diocesano Mons. Luis Urbanč y concelebrada por los párrocos entrante y saliente, padres Martín Melo y Juan Ramón Cabrera, respectivamente; los párrocos de San Roque de La Chacarita, padre Carlos Figueroa Arteaga, y de San Antonio de Padua, padre Ángel Nieva; el vicario parroquial de Nuestra Señora de Belén, padre Leandro Roldán, y el padre Roberto Ochoa, de Santa María, Prelatura de Cafayate, quien viene trabajando pastoralmente en la comunidad de Belén.

Participaron de la celebración miembros de instituciones y grupos eclesiales y fieles de distintas comunidades de la jurisdicción parroquial y de otras donde el padre Melo brindó su servicio pastoral, además de familiares y amigos.

Luego de la lectura del decreto de designación del nuevo párroco, el Obispo bendijo el agua con la que el padre Melo aspergió a los presentes, y después le hizo entrega del Evangeliario para que proclame la Palabra de Dios.

En su homilía, Mons. Urbanč agradeció al padre Cabrera por el tiempo y el servicio pastoral ofrecido durante estos últimos tres años en el Santuario de Belén, habiendo realizado una tarea fecunda, acompañando y enseñando a la comunidad.

Animó al padre Melo a continuar la tarea evangelizadora que se vino realizando junto a la comunidad. Le encomendó que trabaje con los jóvenes fortaleciendo la Pastoral Juvenil y la Pastoral Vocacional, haciendo mención a la necesidad de vocaciones especialmente a la vida consagrada. En este acompañamiento a los jóvenes, dijo que “el padre Martín tiene un perfil importante, que es la dirección espiritual”. Asimismo, invitó a la comunidad de Belén a que puedan trabajar juntos por los jóvenes.

También hizo referencia al tiempo especial que estamos viviendo como Iglesia con este Año Jubilar, y reflexionó sobre los textos bíblicos centrándose en el Evangelio, donde se expresa que las palabras hablan de lo que hay en el corazón; en torno a ello resaltó la importancia de sembrar para dar frutos buenos, tarea pastoral a la que se deberá abocar el nuevo párroco.

Puso de relieve que la tarea en mucha, ya que se trata de dos parroquias muy extensas, que abarcan el Norte Chico y el Norte Grande de Belén, en la que estará acompañado por el padre Leandro Roldán, vicario parroquial, y el padre Roberto Ochoa, incorporado a esta misión en Belén. Resaltó la figura de María en su advocación de Nuestra Señora de Belén como signo de fe en esta zona del Decanato Oeste de la diócesis, animando al padre Melo a que siempre esté en las manos de María, Nuestra Madre.

La ceremonia litúrgica continuó con la profesión de fe y el juramento de fidelidad del nuevo párroco delante el Obispo. En el momento de las ofrendas, el nuevo párroco recibió los Óleos Sagrados con los que bautizará y confirmará, el Cáliz, la Patena y las vinajeras, con los que celebrará la Sagrada Eucaristía; y después de la Comunión, fue depositada en sus manos la llave del Sagrario donde se reserva el Santísimo Sacramento.

Gratitud y bienvenida

Hacia el final de la celebración eucarística se escucharon palabras de gratitud al padre Juan Ramón Cabrera y de bienvenida al padre Martín Melo por parte de miembros de la comunidad parroquial.

A su vez el padre Melo agradeció a Dios, a la Santísima Virgen María, al Obispo y a sus padres, quienes se encontraban participando de la ceremonia litúrgica, como también al padre Cabrera, quien «dejó una comunidad muy ordenada”, dijo. Además, agradeció a sus hermanos sacerdotes presentes, de manera particular al padre Leandro Roldán y al padre Roberto Ochoa, con quienes compartirá la tarea pastoral; y a los laicos que lo acompañaron provenientes de distintas comunidades. Invitó a todos a que “caminemos juntos, necesitamos laicos enamorados de Cristo, y que por amor a Cristo puedan amar y servir a la Iglesia», expresó.

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